NADIE PODRÁ QUERERLE COMO YO
Autor: Juan Pedro Cosano
Comentario y Opinión Personal:
Quizás debido a la "resentida y colérica" leyenda negra instaurada por la cultura anglosajona en España tenemos la fea costumbre de menospreciar a determinados personajes o acontecimientos históricos por el simple hecho de venir relatado desde aquel rincón de Europa que tanta endivia nos deparó siempre, sin molestarnos ni un ápice en investigar y contrastar los acontecimientos en un ámbito amplio del período histórico a tratar. Uno de los personajes históricos más denostado y maltratado fue sin duda Carlos II. Al último Austria nos lo han presentado como un ser "monstruoso", feo, con poco intelecto llevándolo incluso a reducir como retrasado mental. Si a todo esto le añadimos que no pudo tener descendencia, se difunde una mezcolanza que aviva todo tipo de literatura, conjeturas y luchas de poderes hasta conseguir unas insignificantes migajas de lo que Carlos II atesoraba en aquel momento histórico. Estas aparentes malformaciones son claras consecuencias de una reiterada endogamia entre familiares reales durante siglos que llegaron a su momento álgido con la extraña personalidad de Carlos II. En uno de los múltiples matrimonios concertados que se realizaban en Europa casaron a Maria Luisa de Orleans (sobrina de Luis XIV "el rey sol") con Carlos II, a quien ninguno de los cuadros que le realizaban para presentarlo podía ejecutar una copia decente de su fisionomía para mostrarlo con una aceptable carta de presentación. Lo que en un principio fue una dura introducción para Maria Luisa, tras un periodo conyugal de diez años esta adversidad se convierte en un matrimonio feliz, sincronizado, compenetrado y sobre todo envuelto en cariño y complicidad. El matiz de que la reina no consiga quedarse embarazada es la comidilla de toda la corte, llevándola a ser el punto de mira de toda la nobleza española y europea. De forma drástica e inesperada María Luisa muere y sobre este fallecimiento navega la sospecha fundada de envenenamiento. Carlos II quedando tremendamente desolado y solo decide encargar la investigación del suceso a Francisco Antonio de Bances y Cardamo (dramaturgo real y hombre de confianza de la reina) para solucionar el inesperado desenlace.
Mi valoración personal de "Nadie podrá quererle como yo" es de MUY RECOMENDABLE, otorgándole 4 tréboles. Como todas las novelas anteriores de Cosano, estamos ante una novela bien construida, extraordinariamente detallada, donde cabe lugar a la investigación de un posible asesinato regio, una estricta descripción tanto de los lugares geográficos como de las diferentes clases sociales que se desenvuelven en la corte de Carlos II. El lenguaje es envolvente y los diálogos ayudan a lo largo de la novela a imbuirte entre sus calles, entre los corrillos de palacio e incluso en alguna que otra alcoba. Del mismo modo, Cosano enriquece la novela rodeando a los personajes principales de secundarios muy bien perfilados y que otorgan en cada momento lo que la trama exige de ellos. El autor nos descubre, tras una exhaustiva y férrea documentación, un rey con malformaciones físicas (reitero la endogamia consanguínea durante siglos) que lejos de tener retraso mental, impulso medidas fiscales y administrativas para sacar a España de diferentes bancarrotas y que supo rodearse de verdaderos técnicos y verdaderos conocedores en los temas más acuciantes para España, denostando a los nobles que tan solo buscaban riqueza y poder a costa del pueblo español. La elección del título de la novela con las sentidas palabras que la reina confiesa en su último aliento a su confidente "Nadie podrá quererle como yo" es un auténtico acierto y vaticinio de lo que más tarde ocurrió. Pues lo que de verdad sucedió más tarde no fue otro asunto que el infructuoso enlace con la casa alemana de Neoburgo, dando lugar a un enorme problema sucesorio que trajo como consecuencia inmediata el final de la dinastía más poderosa y exitosa para España, los Austrias. Cosano impulsa en sus novelas otro tipo de aliciente para el lector. La necesidad de querer saber más de los personajes de sus novelas y en este caso sin duda aún con mayor motivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario