INMORTAL
Datos Técnicos:
Reseñar una novela de Mariano Fernández Urresti es un acto de valentía, temeridad y osadía que me voy a permitir amparado y protegido por la amistad que me une al autor desde que tuve el placer en el año 2009 de leer "La Conexión Buonarroti" y por divulgar su extraordinaria trayectoria literaria. Desde aquella lectura no he podido dejar de leer y escuchar todo lo que Mariano publica, ya sea novela, ensayo o entradas en sus diferentes perfiles de redes sociales y otros medios de comunicación. Su bagaje literario ha ido ganando entereza, descaro y desenvoltura a lo largo de los años, pero su inconfundible estilo está basado en unas obras perspicaces, inteligentes, extremadamente trabajadas, que manifiestan una documentación exhaustiva, pormenorizada, fidedigna, sin saturar al lector, aportando riqueza y verosimilitud al tema sobre el que haya escrito, con un ritmo pulcro y constante a lo largo de la novela, pero sobre todo con unos finales perfectos y creíbles. Ha publicado con varios sellos editoriales y simultaneado novelas con ensayos según ha ido creyendo conveniente ese espíritu independiente que atesora desde hace años. Sea cual sea el género literario en el que Mariano escriba nunca deja indiferente al lector. Lo que para otro podría ser un trabajo extenuante y devastador física y psicológicamente en el duro momento de recopilar y leer la indispensable documentación para plasmar la idea del autor, para Mariano es un momento de deleite, complacencia y disfrute que más tarde transmite a los lectores con generosidad.
Opinión Personal:
En "Inmortal" (Ed. Almuzara), Mariano nos embarca al Londres victoriano, obsceno, vicioso y superpoblado del siglo XIX. A partir de la inquietante y manida idea de la inmortalidad, Mariano se construye una novela trufada de intrigas, asesinatos, desapariciones, misterios, amores, códigos secretos, venganzas, creencias irrefutables, literatura, reuniones ocultistas, poderes sobrenaturales, etc. En la novela encontramos un mar de datos e informaciones fundamentadas en las más afamadas novelas de dos grandes escritores ingleses del siglo XIX como son Bram Stoker con "Drácula" y James Mattew Barrie con "Peter Pan" coexistidos con unos terribles y violentos sucesos acaecidos en aquella época bajo el sello del conocido como Jack el Destripador. Nos regala un juego de reflexiones sobre cómo podemos encauzar esa búsqueda de la inmortalidad partiendo de las perspectivas del sendero oscuro a través de Drácula o el supuestamente blanco de Peter Pan. Para engrandecer de manera completa la novela, el autor erige una serie de telarañas en forma de intrahistorias, plagadas de datos históricos a través de personajes reales y otros de ficción, creados por la ingente y voraz imaginación del autor. Del mismo modo tras la lectura de "Inmortal" Urresti nos aviva, a través de su constante conocimiento documental, la posibilidad de que ambos senderos no sean tan previsibles como nos han pretendido hacer creer. Reitero que este aspecto es una constante en todas las obras de Urresti, tras leer sus obras te quedas con cara de tonto, pensando ¿Coño y si es verdad...? Según Mariano, Stoker reconoce en su prefacio que los hechos relatados en su obra eran reales y que había tenido contacto con los protagonistas del drama. El documento en el que figuran las galeradas de "Drácula" es un enigma sin resolver, con lo que puede dar pie a grandes elucubraciones literarias y de otros aspectos. Por el otro lado, "Peter Pan", (Pedro por la parte judiocristiana y Pan por la pagana) no parece ser tan cordial, amable y limpia como nos pretenden revelar al describir a niños que nunca quisieron crecer y enfocándola como literatura infantil o juvenil. Tras leer "Inmortal" todo eso queda en el aire. Para enmarañar todavía más la trama Urresti nos invita a conocer el famoso "Edén, la isla de Avalon, el jardín de las hespérides o el santo grial" que se narra en las escrituras y en múltiples leyendas ancestrales.
El hecho de no creer no impide que algo no sea real y nunca podemos dejar que nuestras creencias nos impidan ver o pensar de modo diferente. Mariano es sin duda un autor que invita a los lectores a pensar, a especular, a reflexionar, a poner patas arribas sus creencias, sus ideologías, pero siempre desde el conocimiento, el respeto y la veracidad.
Mi valoración personal de "Inmortal", es de MUY RECOMENDABLE, otorgándole 4 tréboles, con matices de PERFECTA.
En "Inmortal" la concesión de datos, información y referencias literarias, históricas, geográficas, sociales, literarias, etc es innumerable y digna de mención. Siguiendo un minúsculo ápice de curiosidad he rastreado las fuentes a las que hace alusión Mariano en la novela y tal y como me ha sucedido siempre en todos sus trabajos, TODO ES EXACTO. Mariano nos incita a jugar en todas sus novelas, pero sin duda sus cartas son las mejores. La clarividencia que demuestra el autor tras la contumaz lectura de semejante montaña de documentación ya la quisieran muchos autores considerados famosos. En "Inmortal", nos instiga a indagar los inescrutables y misterios caminos en búsqueda de aquello que anhela el ser humano desde los inicios de la humanidad, que no es otra cosa que la perpetuidad del ser a través de la inmortalidad, doblegando la voluntad de Dios de manos de dos grandes autores del siglo XIX a través de sus más memorables obras. Mariano parte de una idea, construye una trama, escudriñando su talento y buscando información en esa perpetua y maravillosa biblioteca de libros, legajos, recortes, podcasts, entrevistas o conversaciones en las que ha participado nos embarca hacia reflexiones, dejando pinceladas de historia en cada página, demostrando un control exhaustivo de los tiempos de la trama, describiendo extraordinariamente los lugares donde transcurren sus novelas, sabiendo a que personaje darle prioridad en cada momento, aportando una amalgama de intrahistorias dentro de sus novelas para llevar al lector siempre de la mano del suspense, la incertidumbre y la curiosidad en cada capítulo. Si toda la obra es inmejorable, quiero destacar, el final. "Inmortal" navega sobre un espectro muy particular, personal, íntimo y literariamente muy difícil y anticuado, donde el autor se permite emparejar con dos grandísimos escritores, siendo capaz de transcribir en su novela unos guiños literarios análogos a los escritos en las "Inmortales" obras de "Drácula" y "Peter Pan".
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