LA ORDEN DE LOS CONDENADOS
Datos Técnicos:
Comentario sobre la obra:
Bajo una portada tan interesante como enigmática de un siniestro personaje cubierto de una capa purpurada, con una daga en la mano de modo desafiante y la ciudad de Roma a sus pies la nueva aventura literaria de Alan Pitronello “La orden de los condenados” (Ed. Pàmies) es una apuesta segura de lectura para disfrutar estos primeros días de otoño. Además, la confianza que el prestigioso sello editorial Pàmies está mostrando con este joven historiador corrobora que el tiempo y el dinero aportado será bien invertido.
Uno de los matices que más me atrapa de este autor es su riqueza y claridad documental a la hora de construir novelas corales donde los personajes reales irrumpen con los ficticios dando verosimilitud, realidad y veracidad a todos los capítulos que sucedan en la trama. En "La orden de los condenados", podemos destacar el juicio de fraguar la novela a partir de tres aspectos básicos: la historia de Diego García de Paredes (los hechos transcurridos a lo largo de su vida resultan tan increíbles que es un reto para cualquier novelista hacer que todo verosímil, pero Alan le desciende al barro dotándolo de defectos y debilidades), la leyenda negra de los Borgia (donde hay mucho que contar, y sobre todo, que reescribir, Alan opta por trazar sus personajes sin los prejuicios y costumbres de esta noble familia que no fueron diferentes de cualquier miembro de la nobleza o de la curia en aquel momento) y la primera campaña en Italia del Gran Capitán (quien en apenas entre 1494-1498 cambio el arte de la guerra y elevó a la infantería a unidad de elite). Pero lejos de realizar una novela bajo estos acertados matices históricos y literarios, Alan irrumpe con la presencia de los afamados, valientes y consagrados Tercios Españoles. Donde el honor, la valentía, la nobleza, el compañerismo, la disciplina y el orden son los mandamientos del mejor ejército nunca conocido hasta la época. Y, dicho sea de paso, estos mismos soldados que tanta fama y experiencia cosecharon en aquellos territorios itálicos más tarde irrumpieron en el nuevo continente consiguiendo conquistar ingentes territorios hostiles con apenas unos centenares de valientes soldados. La novela continúa fusionando un perfecto y exhaustivo conocimiento la situación geopolítica de Europa, las alianzas y venganzas entre los distintos reinos cristianos, la situación caótica, depravada y obscena de Roma y de sus príncipes cardenalicios donde la intriga, las sectas rituales, las venganzas y los secretos alimentan contiendas milenarias entre diferentes familias. A pesar de ser una novela que transcurre en Roma en el siglo XV es muy hispánica por todos los personajes que la construyen y enaltecen tanto en primer plano como bajo los tapices de sus intrigas europeas.
Mi valoración personal de "La orden de los condenados" es de MUY RECOMENDABLE, otorgándole 4 tréboles. Conociendo las anteriores obras de Pitronello está nueva aventura era sin duda una lectura segura sobre intrigas, sectas, la depravación cardenalicia frente el hambre del pueblo, un perfecto conocimiento del lenguaje, la geografía, la geopolítica europea durante el renacimiento, sus efímeras e interesadas alianzas, sus matrimonios de conveniencia, venenos, las rencillas entre familias, nobleza y curia, debate intelectual respecto a Dios, pero donde hay cabida para el honor, la valentía, el amor, el compañerismo, la violencia, la lealtad, la guerra, la misericordia, la disciplina bajo el amparo de los Tercios españoles destacados bajo el mando del Gran Capitán a los diferentes asedios realizados por estos en el reino de Nápoles. Alan corrobora un perfecto manejo del lenguaje, con un ritmo lineal en constante crecimiento que mantiene al lector atrapado entre sus páginas. Las descripciones paisajísticas y geográficas de las plazas italianas son impecables, muy detalladas, pero me gustaría destacar la soberbia construcción de los personajes como un acierto extraordinario a lo largo de su carrera literaria. Es a través de estos personajes donde el autor nos introduce en el meollo de la trama, en el fragor de la batalla, en los asedios, en los duelos por honor, a pisar el suelo tambaleante de una torre asediada, a oler a pólvora tras cada disparo de arcabuz e incluso en el amor.
Me gustaría destacar que la novela rinde un merecido homenaje a todos aquellos extraordinarios y anónimos personajes como Violante que hacen gala del rol de la mujer en unos momentos históricos duros en los que las mujeres no dejaban de ser un mero acompañante en la historia que construían siempre los hombres y donde sus historias apenas han sido plasmadas y nunca valoradas. Pero donde cada una de ellas tendría argumentos suficientes para crear una novela como personaje principal.
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